Cada vez
que la situación en la península de Corea entra en crisis, los medios europeos
y americanos suelen llamar a la puerta de Alejandro Cao de Benós, el único
representante occidental de Corea del Norte, natural de Tarragona. Funcionario
del país asiático en calidad de delegado especial en el extranjero, Cao de
Benós viaja hoy a Pyongyang, donde pretende permanecer hasta finales de abril,
“siempre que no empiece la guerra, en cuyo caso me quedaré allí si así me lo
ordenan”, asegura.
Estos días, los ojos de medio mundo se han posado sobre el país
comunista tras su decisión de declarar el estado de guerra y de amenazar a EEUU
y sus vecinos del sur con comenzar una “guerra total” en el caso de que estos
disparen o avancen sobre territorio norcoreano. “Sin Corea del Norte no
existirá el mundo”, advierte.
¿Cual
es la situación ahora mismo en la península de Corea? ¿Es probable que estalle
un enfrentamiento inminente?
La situación es muy crítica porque los Estados Unidos han
movilizado submarinos nucleares y portaaviones, que están realizando maniobras
de fuego real en la frontera. Por lo tanto, puede estallar el conflicto en
cualquier momento, ya que el Ejército Popular está a la espera y tenemos la
experiencia de cuál es la política imperialista de los Estados Unidos.
¿Por
qué se producen estas tensiones ya históricas entre Corea del Norte y del Sur y
EEUU?
Principalmente se dan porque, al final de la II Guerra Mundial,
EEUU ocupa Corea del Sur, establece sus bases, así como una dictadura militar
bajo su control, que ha durado hasta nuestros días. El ejército surcoreano no
tiene control sobre sus propias tropas, sino que son los EEUU los que mandan y
los que azuzan a ese ejército para que se enfrente con sus propios hermanos en
el norte. Así que hasta que no abandonen los Estados Unidos su control sobre la
península coreana, no podrá haber nunca una paz definitiva y una reunificación
del país.
El
mes pasado Corea del Norte amenazó con lanzar un ataque preventivo contra EEUU.
¿Por qué?
Eso se debe al acoso sistemático, tanto al bloqueo económico
como a las sanciones de la ONU y como, vuelvo a decir, al asunto militar, las
maniobras militares que se están efectuando en nuestra frontera, que ha llevado
a nuestro ejército a estar en total alerta para que, en cualquier momento en
que los EEUU crucen la línea que separa las dos Coreas o lancen un misil a
territorio norcoreano, se produzca una respuesta inmediata, no sólo contra las
tropas, sino contra las bases americanas, tanto en Guam como en Hawai, Okinawa
en Japón o incluso sobre territorio estadounidense.
¿No
cree que este lenguaje bélico que se está utilizando puede contribuir a
calentar las cosas cada vez más y llevar la situación a un punto irreversible?
Lo que está claro es que deben decirse las cosas muy claras.
Como prevención, hay que decir a EEUU que, si intenta atacar, eso es lo que se
va a encontrar. Usamos un lenguaje fuerte precisamente porque los imperialistas
norteameticanos usarán nuestra debilidad para iniciar un ataque al estilo de
Irak, Afganistán o Libia. Por lo tanto, es necesario decir las cosas claras
cuando hay que decirlas para prevenir males mayores.
Corea
del Norte se queja sobre todo de las maniobras con submarinos nucleares por
parte de EEUU.
Es una de las causas principales de esta crisis. Si estamos en
un momento tan crítico es precisamente por eso, porque los EEUU están
utilizando todo su arsenal en la frontera. Si ahora mismo Francia, o Reino Unido
con Gibraltar, movilizaran todo su arsenal nuclear y se pusieran a hacer
maniobras militares en la frontera, disparando con fuego real, el ejército
español, que es supuestamente un ejército aliado, estaría en alerta y se podría
desencadenar un conflicto. De hecho esto ya existe en casos como barcazas
pesqueras. Hay que decir que que encontramos portaaviones y submarinos
nucleares realizando pruebas.
¿Qué
condiciones se tendrían que dar para que fuera posible la paz entre las dos
Coreas?
Corea del Norte siempre desea la paz pero no la mentira, nunca a
cambio de renunciar a la soberanía o al sistema político que ha elegido su
nación, el que ha decidido el pueblo. Por lo tanto, la única solución para una
distensión o para llegar a acuerdos es que paren esas maniobras o que se
desplacen, por lo menos, 200 kilómetros hacia el sur, en vez de hacerlos en la
frontera. Tienen mucho territorio para efectuarlas. Incluso cualquier fallo
técnico puede desencadenar un conflicto armado total.
El
mes pasado la ONU implementó nuevas sanciones contra Corea del Norte, con el
apoyo de China, uno de sus pocos aliados. ¿Está China dando la espalda al país?
China es un país capitalista
desde los años 90, ya abandonó su sistema socialista y, en este sentido, mira
por sus propios intereses. Por una parte es vecina de Corea del Norte y ha
invertido cientos de millones de dólares en un nuevo parque industrial que
acabamos de abrir en la frontera pero, por otra parte, quiere también hacerle
el juego a los EEUU, porque como miembro del comercio internacional
globalizado, o capitalista, le debe pleitesía al imperio. Podemos decir que
China es un país de múltiples caras, que mira por su interés, y que intenta
siempre un poco mantener ese status quo con todas las naciones.
En
la prensa se ha hablado sobre todo del complejo industrial en la frontera con
el sur donde, según estas informaciones, las condiciones laborales de los
trabajadores norcoreanos son extremadamente precarias.
Es totalmente falso. Todos los trabajadores norcoreanos que operan
allí -hay unas 123 empresas y unos 50.000 trabajadores del norte- están bajo
supervisión norcoreana y eso es precisamente lo que nos está ayudando a
conseguir muchos dólares y euros como fuente de financiación de divisa externa.
Al ser un sistema socialista y cerrado, al no depender de las fluctuaciones
bancarias internacionales, Corea del Norte se debe suplir de dólares o euros
para realizar importaciones mediante otros medios. Lo puede hacer a cambio de
sus propios recursos naturales, o recibiendo dólares o euros de empresas
surcoreanas. En cualquier caso, todos los trabajadores en Corea del Norte
siguen unos mismos principios y derechos laborales. De hecho, estos insultos
son los que han motivado a nuestro gobierno a declarar hace apenas dos o tres días
que, si continúan, no tenemos ningún inconveniente en cerrarlo y expulsar a
todas las empresas surcoreanas inmediatamente. Así que deben medir sus palabras
y saber que esto es un proyecto de reunificación, no es un proyecto que nos
obligue a besar los pies al capitalismo.
¿Ese
proceso de reunificación lo ve posible a corto plazo? ¿Qué condiciones deberían
darse?
Tuvimos un avance muy significativo hacia la reunificación del
año 2000 al año 2008, durante las dos legislaturas del presidente [surcoreano]
Kim Dae-Jung. Recordemos que este presidente ganó el premio Nobel de la Paz. Se
establecieron las bases de este proceso en dos acuerdos en el año 2000 y el
2007, para llevar a esa paz, a esa distensión que desembocara en una
reunificación. Estaban basados en la idea de un país con dos sistemas
diferentes. La reunificación no se produciría jamás a la manera alemana, sino
que se respetarían los sistemas existentes, vigentes en cada una de las partes:
comunismo en el norte y capitalismo en el sur, pero bajo una sola bandera. Esa
es la premisa con la que han estado de acuerdo tanto la mayoría de pueblos
norcoreanos como surcoreanos y sus gobiernos. En el 2008 llegó un nuevo
presidente, Lee Myung-bak, que fue un presidente ultraconservador y
pronorteamericano, destruyó todos esos acuerdos formados durante esos años, y
volvimos a la situación de inicio, de enfrentamiento. De esos remanentes de
progresos por la reunificación a lo largo de esos ocho años sólo queda este
centro industrial en la zona de Kaesong, del que hemos hablado. Ahora hay que
ver si la nueva presidenta, Park Geun-hye, es capaz de ser independiente y de
obligar a los norteamericanos que se queden en su sitio y dejar que Corea sea
gobernada por los coreanos.
¿Por
qué Corea del Norte es uno de los países más aislados del mundo? En caso de
guerra, ¿crees que algún país puede entrar en la guerra en apoyo al norte?
En caso de guerra no esperamos el apoyo de nadie. Corea es
autosuficiente, con su arsenal militar. Hemos visto casos como el de Irak,
donde sus hermanos musulmanes no acudieron en su ayuda, ni de los hermanos
iraquíes, ni de los libios. Por lo tanto, todas esas alianzas políticas,
tradicionales, etc., a la hora de la verdad cuentan poco, así que Corea se
basta por sí misma para obtener una victoria sobre el ejército norteamericano,
en el caso de que hubiese una guerra. En cuanto a la definición que haces de
que Corea es un país cerrado, no lo es. La propaganda y la manipulación
occidental y el bloqueo han llevado a hacer esta visión del país, cuando Corea
ha estado siempre abierta a cualquier persona que se acerque con respeto y que
simplemente entienda que existen otras formas de vida y otros sistemas
políticos. Corea siempre tiene los brazos abiertos y, de hecho, hay relaciones
diplomáticas con la mayoría de países. En el caso de España, desde el año 2001.
¿En
qué consisten, a grandes rasgos, las sanciones implementadas sobre territorio
norcoreano? ¿Qué consecuencias tienen?
El bloqueo lógicamente influye muchísimo porque no se pueden
hacer transacciones monetarias ni podemos hacer comercio internacional
libremente. De hecho, no podemos prácticamente ni hacer transporte marítimo,
porque las tropas norteamericanas bloquean cualquier carguero civil. El
objetivo es asfixiar a nuestra economía para obligarnos a convertir nuestro
sistema en otro capitalista, pero eso no va a suceder. En Corea, desde el 9 de
septiembre de 1948, estamos bajo sanciones norteamericanas. Aunque eso
dificulte muchísimo el factor económico, tenemos fórmulas para saltarnos ese bloqueo.
Por lo tanto, no va a funcionar ni va a obligar a Corea del Norte a
arrodillarse. El bloqueo ha tenido influencia en algunos hechos graves, como la
hambruna que hubo del año 1995 al 2000, que estuvo potenciada por desgracia por
los desastres naturales que azotaron al país. En Corea del Norte, apenas el 15%
del territorio es cultivable. Esa conjunción de terribles factores, unida a la
desaparición del socialismo a nivel mundial, tras lo cual nos quedamos sin
aliados, sumió al país en una crisis económica total, en la que también hubo
una crisis de alimentos. Afortunadamente, desde al año 2000, la economía
empieza a recuperarse. En el último año ha crecido más de un 10% y actualmente
no hay nadie, absolutamente nadie, que pase hambre en Corea. Probablemente hay
más gente ahora mismo que pasa hambre en España que en Corea del Norte.
¿Ese 15% de terreno cultivable os convierte en importadores de
alimentos?
Sí, Corea del Norte es un país importador de alimentos. El trigo
se importa desde Rusia, el arroz desde Tailandia y, como sabemos, los alimentos
cada día son mucho más caros porque su precio está manipulado por las bolsas de
Chicago y por intereses capitalistas. Están haciendo crecer el precio del
alimento básico a unos niveles tales que están generando mucha más disparidad,
diferencia de clases en el mundo, y más sufrimiento y más pobreza. Como Corea
del Norte tiene que importar del extranjero el grano y tiene que pagarlo en
dólares o euros, que lógicamente no tiene, porque no es un país capitalista y
su moneda no es convertible, se crean todas estas complicaciones a la hora de
ajustar todas las raciones necesarias para alimentar a los 24 millones de habitantes.
¿Qué
países más allá de EEUU ejercen este bloqueo?
China ha aprobado los últimos bloqueos en el Consejo de
Seguridad, por lo que está forzando a nuestras empresas a que se queden en
Corea y no puedan comerciar en el exterior. Pero es que aparte hay una ley
mediante la cual los estados títeres de EEUU, como Canadá, tampoco pueden
comerciar libremente porque se considera comercio con el enemigo. De este modo,
si un señor en Canadá quiere importar dos contenedores de ropa de Corea del
Norte, porque es muy barata y de muy buena calidad, no puede hacerlo por esa
ley que le imponen los EEUU. Por lo tanto, se trata de una asfixia múltiple
que, de nuevo, tiene el objetivo de destruir el sistema político soberano de la
república.
En
el caso de que estallara la guerra, Corea del Norte se vería enfrentada a
grandes potencias, como a Japón, a EEUU o la propia Corea del Sur. ¿No hay
miedo de este enfrentamiento pueda causar graves daños al país y, en el caso de
que se usen armas nucleares, su desaparición?
Para nada, todo lo contrario. Se ha declarado que sin Corea del
Norte no existirá el mundo. Estamos hablando de uno de los ejércitos más
grandes de todo el planeta, con más de un millón de soldados y más de siete
millones de milicianos, la Guardia Roja Obrero-Campesina, que dispone además de
misiles intercontinentales y cabezas nucleares que pueden alcanzar cualquier
punto del continente norteamericano. Por lo tanto no tenemos miedo. Ya fueron
15 las naciones que lucharon contra Corea del Norte en los años 50, incluida
Grecia, Colombia o Australia. Al contrario que entonces, que teníamos un país
recién nacido, ahora llevamos 60 años de creación armamentística y de defensa
disuasoria, por lo que uno no puede imaginar la capacidad de golpeo que tiene
ahora mismo Corea del Norte contra EEUU. Lo primero sería destruir todas sus
bases en el Pacífico, no sólo en Corea del Sur, sino también en Japón, en la
isla de Guam y Hawai.
Al
margen de las relaciones internacionales, la ONU y varios observadores
internacionales acusan a Corea del Norte ser el escenario de violación
sistemática de derechos humanos.
Esto es parte de la manipulación propagandística. De hecho, los
derechos humanos son tener una casa, tener educación, tener derecho a una
sanidad digna, y eso es lo que no se cumple en la mayoría de países
capitalistas, el primero de ellos EEUU. Esos son los derechos humanos para
nosotros. Estamos creando una sociedad igualitaria, los medios de producción
pertenecen al pueblo y no a una oligarquía. Por lo tanto, son las típicas etiquetas
que usa el capitalismo para lavar el cerebro a la gente a través de los medios
de comunicación. En Corea no hay abusos contra los derechos humanos, hay una
gran unión, una gran armonía y felicidad entre la gente, lo que muestra
precisamente esa capacidad que tiene el país para enfrentarse a la primera
potencia nuclear, que son los Estados Unidos.
Pero
existen otros derechos igualmente importantes, como el de expresión o las
libertades políticas.
La diferencia básicamente es que en Corea del Norte todos vamos
a una, es una sociedad comunista, en la que los intereses comunes priman sobre
los individualistas. La forma de expresar tus ideas es diferente pero cualquier
persona tiene capacidad, tiene la posibilidad de exponer sus ideas y su opinión
política e incluso puede presentarse a las elecciones para presidente de la
república, si es capaz de convencer a sus compatriotas.
También
se acusa a Corea del Norte de tener campos de concentración en el territorio.
Es un medio más de propaganda para intentar equiparar Corea con
el nazismo o con otros regímenes que han existido. Es completamente falso. De
hecho, las fotografías difundidas por la prensa occidental, hechas a muchos
kilómetros de altura a través de satélites, lo único que muestran son granjas cooperativas
y minas. Ahí no hay ni una sola evidencia de la existencia de estos campos de
concentración. Lo que ocurre es que, como siempre, se aplica el doble estándar.
Para difamar e insultar a Corea del Norte, todo vale. En cambio EEUU, que
realmente tiene esas cárceles, comete esos abusos en Abu Grahib, en Guantánamo
y en muchos otros países, sale totalmente impune. En Corea del Norte no existen
esos campos de concentración y, si existieran, el sistema caería por su propio
peso, como ocurrió con otras repúblicas socialistas.
Si
el país está “limpio” en ese sentido, ¿por qué no se deja entrar a las
comisiones de derechos humanos de la ONU para que confirmen esto sobre el
territorio?
Porque son precisamente piezas de esa misma propaganda. EEUU
controla esos organismos. De hecho, les paga. La mayoría de la financiación de
la ONU viene del propio Congreso norteamericano. Lo que no vamos a permitir es
que un grupo de personas que han estado difamando, acusando, colaborando con el
bloqueo económico para que tengamos problemas en alimentación, nos examinen.
Gracias a esos señores que supuestamente defienden los derechos humanos EEUU ha
podido justificar su bloqueo económico. Es decir, gracias a esos defensores de
los derechos humanos están impidiendo que podamos importar comida. Son
fanfarronadas de personas pagadas y muy bien pagadas, que supuestamente con su
trabajo voluntario van a examinar los derechos humanos y que en realidad no
hacen más que propaganda barata. Nuestra opinión es que el perro ladra pero el
tren avanza. No importa cuánto difamen, ya que lógicamente vamos a seguir
nuestro camino. Desde luego, lo que no vamos a hacer es invitar a cenar a un
señor que nos está insultando cada día y que además nos pone las cosas más
difíciles.
Kin
Jong Un es ya el tercero de la misma línea sucesoria en el poder. ¿No es esto
una clara evidencia de la ausencia de democracia en Corea del Norte?
Ésta es otra de las etiquetas
falseadas. La democracia significa darle el poder al pueblo, y es lo que existe
realmente en Corea, donde el pueblo es dueño de los medios de producción. El
caso de Kim Jong Un hay que entenderlo como el de una figura paternal, de unión
entre la gente, que no se puede entender si no se conoce la cultura coreana, si
no se ha estudiado un poco de confucianismo, budismo, y, sobre todo, la idea juche [filosofía típicamente coreana].
Básicamente, el poder reside en el pueblo a través de la Asamblea Popular
Suprema, que está formada por 687 diputados, en la cual tenemos un presidente
electo. La figura de Kim Jong Un es para aportar continuismo, para que todo el
mundo siga con las ideas socialistas. No es que él decida todo lo que quiera o
cuando quiera, ya que también tenemos primeros ministros, un gabinete y el
poder popular que es realmente quien manda.
Pero
en última estancia sí recaería el poder en Kim Jong Un.
Sólo a nivel militar. En la última decisión fue votado de forma
unánime por esa Asamblea Popular Suprema. No ha heredado el poder, sino que ha
sido elegido por estos casi 700 diputados, que son a su vez elegidos cada 5
años por cualquier mayor de edad, a partir de los 17 años. Se puede presentar
quien quiera, de forma independiente o como miembro de cualquiera de los tres
partidos: el Partido del Trabajo, el Partido Socialdemócrata de Corea o el Partido
Chondoísta Chong-u.